Hace unas semanas me invitaron a participar de una muestra de ilustraciones sobre el tema "Refugiados". Iba a participar con una pieza que ya tenía hecha al respecto, una imagen de bienvenida y esperanza que hicimos con una amiga a propósito de la llegada de las familias de Siria a Uruguay el año pasado. Pero no pude. Entre el mensaje de invitación y la fecha de entrega, que es en estos días, pasó de todo en relación al tema guerra, desplazados, refugiados.

Hay dibujos que sólo pueden hacerse de noche, que sólo pueden hacerse así, al grito, y que deben hacerse una vez y otra y otra y otra hasta que quede claro que no, que ninguna guerra, ni en Francia, ni en Siria, ni acá ni allá, van a conducir nunca a nada bueno, a nada que no sea dolor, desamparo y muerte.





Micromemoria porteña

Pequeña larga obra en desarrollo en Valparaíso.
Ampliaremos.





Pasamos un terremoto. Estamos bien



Hoy es 11 de setiembre de 2015.
Desde principios de marzo estoy viviendo en Valparaíso, Chile, junto (y gracias) a mi compañera, Eugenia. Creo que desde que supe que nos mudábamos acá estoy pensando en esta fecha y en que la iba a pasar en este país. Sin una idea concreta, pero sabiendo que iba a estar en Chile para la conmemoración del golpe de estado que derrocó a Salvador Allende, sabiendo (de oído) que en este país persiste, en buena parte de su población, un sentimiento de apoyo a ese golpe y su ejecutor principal, Augusto Pinochet. Pero sin saber mucho más, sin pensar mucho más que tener la idea de que iba a vivir de cerca, como fuera, la conmemoración de esta fecha. 

A las pocas semanas de estar acá me encuentro, en el vuelto del almacén, esta moneda. Es la cara de una de diez pesos, que equivale, más o menos, a cero coma cuatro pesos uruguayos; muy poca cosa. Pero me encontré con que esta moneda en particular, acuñada en 1981, tiene en su cara, en vez del perfil de Bernardo O'Higgins, una alegoría de la Libertad (de gurí coleccionaba monedas. Compraba algunas en la feria, conseguía otras por parientes y amigos de mis padres, tratando siempre de que fueran raras, de que parecieran distintas y con un algo que les diera un valor especial, simbólico, así que ésta me pareció particular. Podría decirse entonces que fue el típico caso de deformación infantil, ya que no profesional). Decía, la moneda tiene una alegoría de la Libertad, junto con esa palabra escrita y algunos otros datos: el nombre del país, el símbolo de la casa que la acuñó y la fecha 11-IX-1973.
Hubiese pensado "esto es joda" si pudiera considerarse tan livianamente algo así. Más que pensar, la moneda me dio algo parecido al asco, al miedo, al rechazo. Pero por supuesto la guardé.

Esta moneda fue acuñada, junto con otras miles, como celebración explícita del golpe de estado y el derrocamiento del gobierno de la Unidad Popular. 
Una moneda de uso corriente y que, por su denominación, estaría presente en la cartera de casi cualquier dama, en el bolsillo de casi cualquier caballero y, porqué no, en la mano de casi cualquier gurí (porque claro, hay que tener la posibilidad de tener una moneda, y eso no es para todo el mundo). 
Un recordatorio que mancha la palabra Libertad (una de las más bellas, de las más amplias, de las más complejas que nuestro lenguaje -el humano, el único que existe como tal- haya podido elaborar) y la usa como síntesis de una acción salvaje y cobarde como fue derrocar a un gobierno elegido por el pueblo a punta de fusil y caída de bomba y poner, en su lugar, un gobierno de terror, de imposición, destructor.
Un objeto que hoy sigue circulando en los bolsillos, las carteras y las manos. Porque todavía puede encontrarse en el vuelto que a uno le dan por ahí. 

Esta moneda es de acá, de Chile. Pero no es solamente chileno el problema de cómo convivir, cómo pensar y cómo actuar sobre nuestro pasado y su lastre. Es un problema de cada país, y de todo el continente, especialmente de los que vivimos el quiebre histórico de los golpes de estado, especialmente los de la segunda mitad del siglo veinte. Pensar y entender la libertad es la gran tarea. Pensar qué significa, qué alcances tiene, qué implica, qué costos conlleva, a quiénes alcanza, cómo y porqué. Qué es hoy, en estos países, la libertad. En qué se convirtió, de qué es sinónimo, de qué, antónimo.

Una moneda puede ser un buen lugar para empezar. No por su precio, sino por su valor, por su presencia en la vida cotidiana. ¿qué se puede hacer con algo así? Grabarse la fecha, por ejemplo. Conmemorar. Y dar pelea para que una palabra tan bella no quede presa en las manos, los discursos y los fetiches de un mínimo grupo. La libertad es otra cosa, es de otra cosa, es para otra cosa. Es para toda la Humanidad.

Búsqueda. 
Próximamente, más información.


Gacetilla de prensa aquí.

Nos vemos.

Me invitaron a dar parte de un curso de ilustración (específicamente, un módulo sobre ilustración digital) y, entre los materiales que armé, seleccioné unas cuantas fotos de mi archivo personal para darles a los estudiantes como insumo para los trabajos que les vengo proponiendo durante el curso. El resultado en clase viene siendo muy lindo, así que decidí extender la disponibilidad de estas imágenes a quien quiera usarlas, sea para trabajos personales o para trabajos por encargo.

Es una forma que encontré, pequeña y desorganizada, pero también honesta, de retribuir con algo a lo mucho que leo, miro y escucho en internet gracias a quienes suben contenidos con el ánimo de mostrar, compartir o difundir.

Suyo.


Diario, nº 149 (año 2013, volumen 1).

Diario, nº 113 (año 2013, volumen 1).


Hace varios días, las amigas de "Donde viven los libros" me sugirieron participar de la campaña "ni una menos".

Me demoré bastante en encontrar qué cosa poder decir gráficamente, que me convenciera, que la encontrara adecuada, y que representara algo de lo que pienso y siento sobre la violencia contra las mujeres. Y entonces anoche encontré un punto de vista, uno muy básico, que ya había empezado a vivenciar al participar, el año pasado, de una de las marchas de las "mujeres de negro": el punto fue, es, qué cosa tengo para decir de este asunto desde mi perspectiva como varón.

Y lo que tengo para decir es lo que publico acá, que la violencia contra la mujer es una vergüenza para todos los varones.

Que se haya tenido que inventar una palabra para definir el hecho de atacar a una mujer por el hecho de que es mujer, que se haya tenido que legislar, pensar y actuar distinto da cuenta de que, como humanidad, tenemos problemas graves, que competen a toda las personas que la integramos, pero que sobre este asunto, competen de manera especial a los varones, por el hecho de ser varones. Porque todas las personas, del sexo que sean, somos iguales, pero eso no quita asumir la parte que a cada cual le corresponda sobre determinados asuntos.

Intentamos hacer de este mundo un lugar mejor. y para eso, hay que enfrentar las cosas más vergonzosas. Todas.

Ni una menos.

Diario, nº 49 (año 2012, volumen 2).

Diario, fuera de programa (año 2012).


Diario, nº 36 (año 2012, volumen 1).

Diario, nº 110 (año 2013, volumen 1).

Diario, nº 129 (año 2013, volumen 1).

más información acá


Diario, nº 120 (año 2013, volumen 1).

Diario, nº 83 (año 2012, volumen 4).

Diario, nº 15 (año 2011, volumen 2).

Diario, nº 101 (año 2012, volumen 5).


Diario, nº 150 (año 2013, volumen 1).


Tengo la intención de que estas publicaciones, más o menos diarias, sirvan tanto para compartir bocetos y apuntes que considero valen la pena ser publicados, y que a la vez me sirvan para ir llevando una especie de diario abierto con retraso, es decir, que siendo cosas dibujadas y escritas hace unos años, reflejen lo que pienso o me pasa o me interesa hoy, ahora, acá.

Hace un rato leí que Luisa Cuesta se está muriendo. Que es cosa de días, nomás. Es decir, no leí eso exactamente, pero es lo que cualquiera más o menos enterado del tema sabe, podría prever, sabe que va a pasar. Y publicar algo hoy se me hizo difícil. Encontrar algo, entre las libertitas ya escaneadas, que refleje lo que quiero decir hoy, es imposible. Por eso elegí esta imagen, pero sobre todo, por eso escribí este texto. 

Vamos a seguir buscando la verdad, exigiendo justicia y haciendo memoria, por supuesto. Pero vamos a estar un poco más solos.

(Si usted no sabe quién es Luisa Cuesta, puede buscar algo de información usando este mismo navegador de internet. Queda en sus manos y sus ganas).

Diario, nº 136 (año 2013, volumen 1).

Después de la entrega de los premios (apuntes y comentario final):

Recibí las justificaciones del jurado para otorgar los reconocimientos al libro, que comparto acá:

Libro álbum
Las integrantes de este jurado elegimos este libro álbum en primer lugar por el estremecimiento que nos causó su lectura. Luego, los análisis teóricos y técnicos confirmaron nuestra decisión. La sutileza del trazo y de la palabra -que tanto nos recuerda a Ayax Barnes, homenajeado en la contratapa-, la combinación texto- imagen lograda apenas con los cambios en el cuerpo, un banquito, los elementos que sostiene quien espera, el silencio y el vacío de la página final sustentan ambas lecturas.
Con tan poquitos elementos Pantana nos enfrenta sin clemencia pero también sin crueldad a la barbarie de las dictaduras latinoamericanas. Creemos también que otros sentidos podrán atraparse según las experiencias vitales de los lectores más pequeños, que conocen  de esperas, de angustias y de silencios. Y también de preguntas y de esperanzas.


Gran premio
Pantana – Sebastián Santana - , conocido como un gran ilustrador, se presenta además con su escritura y su diseño construyendo un impecable libro totalmente de su autoría. Mañana viene mi tío contó también con la valiente decisión de la editorial de publicarlo en una colección para niños.
Un  bellísimo libro que invita al silencio e irremediablemente a la conversación.  Allí reside su potencia. Invita a pensar desde un lugar diferente, la mirada de ese niño, su sonrisa, su esperanza. Nos obliga a hablar con sus lectores de la historia y de lo que  vendrá.
De alguna manera, la nieta  de quien espera bien podría ser cualquiera de nuestros niños, que heredarán la esperanza  de que se abra esa puerta, de  que las preguntas tengan sus respuestas.
Queda en nuestras manos, los adultos, entonces, la decisión y la responsabilidad  de compartir con ellos la lectura, con sus pensamientos y sus palabras. Sin miedo y generosamente. Solo así mañana vendrá mi tío.

La página de Alija


Fue un honor, una alegría enorme haber podido viajar a recibir los premios que Alija le dio a "mañana viene mi tío", un libro que tuve mucha suerte de poder hacer. Y digo suerte sin creer en ella, sin creer mucho en el factor de la suerte, pero algo por fuera de la capacidad profesional y personal me permitió hacer este libro. Este libro salió de otro lugar, del encuentro con mucha gente, de una historia y una lucha que sigue y seguirá. 

En fin, es largo y seguiré pensando en de dónde salió este libro que tuve la fortuna de poder armar, y el privilegio gigante de publicar con Ediciones del Eclipse. 

De nuevo, gracias. Y como dije el viernes de noche, este libro es para quienes, a causa de las dictaduras militares, no pudieron llegar. Pero también es, junto con estos reconocimientos, para quienes seguimos y seguiremos luchando, buscando la verdad, pidiendo justicia y haciendo memoria.

Anoche me enteré que al libro "Mañana viene mi tío", que escribí y dibujé en 2011 y fue publicado por Ediciones del Eclipse a fines de 2014, le dieron dos reconocimientos: el premio a Libro Álbum y el Gran Premio ALIJA, ambos otorgados por la Asociación de Literatura infantil y Juvenil de la Argentina (ALIJA).

Estuvo bravo para dormirse.

Uno no trabaja para los premios, trabaja por y para otra cosa, pero si un reconocimiento llega, hay que celebrarlo. Tenía, tengo todavía, mucho para pensar, para reflexionar, recordar, agradecer, sentir. El honor que significan estos premios, por este libro, en relación a mi trabajo, a mi vida, a mi historia personal, es mucha cosa junta. Alguna vez, pensando en el libro y sus porqués (más allá de la urgencia que me hizo pensarlo en un primer momento), encontré que esta obra resume todo lo mejor que podría hacer hasta este momento. Suena a mucho, pero es así. Está el ejercicio profesional, el aprendizaje dentro de una disciplina determinada, la definición política y filosófica, el deseo personal puro, el reflejo de cierta parte de mi vida, todo eso junto. 

Pero me cuesta decir "mi libro" con esta obra, porque tiene una dedicatoria y por tanto una razón de ser muy particular, específica. Este libro fue hecho como una herramienta de militancia, de lucha, fue bocetado en un día de mucha rabia y tristeza. Por eso fue tan difícil dormirse y es tan complicado escribir este texto, que es de agradecimiento, pero también de puesta a punto a propósito del libro (desde que sabía que por fin se iba a publicar, estaba pensando en que en algún momento, querría escribir y publicar algo, no explicativo, sino complementario a la obra, y esto de los premios da una buena oportunidad).

Este libro es para todas las personas quienes, a causa de las dictaduras militares, nunca pudieron llegar. Y es para quienes siguen, seguimos esperando a la gente querida que falta. Y que siguen, seguimos, pidiendo Verdad, Justicia y Memoria.

Los días siguen pasando. Los años siguen pasando. Se nos van muriendo las personas que esperan y piden, y las personas que saben y se callan. Ya sabemos que es difícil conseguir la verdad, y mucho menos la justicia, que hay una orden de silencio, y una práctica política, demostrada en los hechos, de hacer más bien poco, de no mover el estanque, de dejar que la cosa se hunda de a poquito.

El dolor, la injusticia, la mentira sigue, pero por eso mismo la lucha sigue, para que la memoria siga viva. Porque ya se sabe lo que pasa con los pueblos y las personas sin memoria.

...

Tengo que agradecerle a varias personas en particular, cosa que voy a hacer en privado, pero también tengo ganas de publicar sus nombres, por el apoyo y el cariño que me dieron para poder hacer y publicar este libro.

A Eugenia, Rafael, Gabriela, Aldo, Soledad, Lía, Alfredo, Istvansch, Matías y a mis viejos, gracias.

...





Éstas son los primeros apuntes para el proyecto de libro. 
Fueron hechos el 20 de mayo de 2011, durante la Marcha del Silencio.



El libro no hubiese existido en la forma en que existe si no hubiese conocido éste otro libro, "La línea", de Beatriz Doumerc y Ayax Barnes





Fragmento del comunicado de ALIJA (el documento completo se puede ver acá).

Diario, nº 124 (año 2013, volumen 1).

Con apuntes para una posible campaña de consumo de tabaco responsable (es decir, como reacción a las campañas anti tabaco de mal gusto, como las que se acostumbran ver en las cajas de cigarros de Uruguay, por poner un ejemplo cercano. más información acá).

Diario, nº 66 (año 2012, volumen 3).

Diario, nº 65 (año 2012, volumen 3).

Diario, nº 82 (año 2012, volumen 4).

Diario, nº 111 (año 2013, volumen 1).

Diario, nº 24 (año 2012, volumen 1).

Diario, nº 03 (año 2011, volumen 1).

Diario, nº 13 (año 2011, volumen 2).

Diario, nº 35 (año 2012, volumen 1).

Diario, nº 80 (año 2012, volumen 4).